Wednesday, April 22, 2015

Recuento de daños al filo de abril



Esta vez seré más escueto que la anterior.


 Películas de aquí y allá. El mes ha sido favorable. Frank (2014) es una película que destila humor, con una narrativa impredecible y un final con aperturas que amplían una lectura que de por sí, era fructífera. La actuación de Fassbender es de primera categoría. La escena con los padres de Frank es verdaderamente memorable, desmitifica un montón a los músicos excéntricos. 


La Guía para pervertidos a la ideología (2012) del desopilante Slavoj Žižek, es un exploratorio que sirve tanto para el verdadero análisis crítico cinematográfico como para simplemente pasar un buen rato. Tuve que hacer rewind para la escena del Kinder sorpresa, maldito gordo goloso. Mención aparte, es la única vez en que algo referido a la mugrosa Titanic del igualmente mugroso James Cameron me ha parecido interesante. 


 
The Day the earth stood still (1951) era una deuda para mí desde que la vi en mis años prepúberes en canal 13, cuando el mundo era maravilloso y la tele limpia te otorgaba supersentai un día y películas cincuenteras al otro. ¿Qué se puede decir este peliculón? Es la prueba de lo que de verdad se puede hacer con las imágenes. Véanla, es un puto mandamiento. 


Tokyo trash Baby (2000), una muestra de que la inventiva japucha no sólo sirve para atrocidades y animé cutre. Las actuaciones pecan de efectismo y en algunos momentos el aire amateur da la apariencia de que uno puede subestimar el filme sin culpa, pero en conjunto, es una obra hermosa, mucho más interesante y profunda que la que parece su influencia directa, Amelié.


Lo mejor para el final. The Road (2009), una película de otro calibre. Tenía que ser una adaptación de un maestro como Cormac McCarhty. ¿Hartos del cine catastrofista mierdero de Roland Emmerich? Denle un repaso a este fresco de imágenes tan perturbantes como hermosas. El final es un poco difícil de digerir, pero las aristas de pensamiento que abre son cuasi infinitas. Viggo Mortensen es un actorazo, uno de los mejores de su generación, y lo digo sin sonrojarme.

Literariamente, no han sido semanas fructíferas, aunque sí variables. Allá en la librería leí Wagahai wa Neko de aru, una novela del genial maestro Natsume Soseki, del que podría aprender un montón el tan mentado Mishima. Son casi ochocientas páginas de espesos diálogos sobre el delirio de la mente humana y la ironía del mismo acto de pensar. Y las vivencias de un gato sin nombre. Ahí está, ¿qué más hace falta?  


 También ha estado Por senderos que la maleza oculta, de Knut Hamsun (1949). La caída de un autor respetado en el escarnio da el pie a uno de los testimonios más desgarradores que he leído alguna vez. Jamás en mi vida pensé que sentiría lástima por alguien relacionado con la barbarie nazi. 


Llegué a la saga de Otherland, de Tad Wiliams con retraso. Me propuse leer el cuarto libro, que es el único que pude recabar. No lamento la ausencia de los demás. El tremendismo de su prosa y su obsoleta manera de ver la realidad virtual, amén de sus carencias como prosista me han alejado de una obra que pudo ser grande y se quedó en un pseudo clásico de culto que brillará alguna vez sólo porque no gusta tanto.


Eso fue hoy. De la introducción a la literatura fantástica , de Todorov, las Crónicas Marcianas de Bradbury o Nuestra Especie, de Marvin Harris,  hablaremos en la próxima entrega. Asimismo, le debo una reinvindicación a Sidonia no Kishi. ¡Ahí se ven!

Thursday, April 09, 2015

Putos chibis

Chibi. El concepto de la mediocridad en el manga, representado en su forma más pueril. No es sorpresa que las series con este estilo se enmarquen dentro de lo olvidable. Lo que es una sorpresa es cómo tanta gente se contenta con esta forma burda de estilización. ¿o es simple amargura mía? Pretendo dudar, pero algo dentro de mí, más fuerte que el instinto, y que considero mi pequeña alma crítica, juzga a esto como un desesperado llamado a una simpleza, innecesaria muchas veces, perniciosa otra. El porqué limitar el abanico de las posibilidades del manga de esta forma es una interrogante para la cual no hallo réplica.

Thursday, April 02, 2015

Sin un feriado y sin un sábado

Y... tendré que asistir a la librería el sábado... ¿no son espantosos los sábados que sirven de puente entre feriados?

Observaciones laborales aparte, la película Frank pinta bien, es comom un Scott Pilgrim pero en serio, e irlandés, además. No es un misterio que uno de los personajes parezca un leprechaun en todo momento. Lo que sí redunda en misterio es el porqué los directores siguen esmerándose en hacer ver a Maggie Gyllenhaal como alguien medianamente atractiva, digo, la muchacha tiene capacidades histriónicas, pero hasta ahí. Aparece Michael Fassbender, lo que me hace pensar en la película de Assassin`s Creed (¿cuánto faltará?).

Asuntos más pertinentes, or último. Un cuento mío fue finalista en un concurso en España, organizado por una pequeña entidad editorial (o más bien un taller de narrativa, como lo llaman ellos). Genial eso, sí, tomando en cuenta que eran como ochocientos participantes de habla hispana y eso. Sólo que el cuento ganador fue una verga. Una paja. Otras expresiones despectivas de turno. Bueh. Ya sabrán. Si consideran que basta un cuento sobre un app para un puto smartphone como ciencia ficción, allá ellos. ¿Desahogo? ¿Dónde?  

Ahí les va el trailer de Frank. No va mal, ya lo dije. Si luego hace falta putear, ya se enterarán, apreciados.